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Progresar para un joven no son $600.
31/1/14- La presidente lanzó hace una semana el plan PROGRESAR es un nuevo derecho que tienen los jóvenes entre los 18 y 24 años que no trabajan, trabajan informalmente o tienen un salario menor al mínimo vital y móvil ($3.600) y su grupo familiar posee iguales condiciones, para iniciar o completar sus estudios en cualquier nivel educativo. Es una prestación económica de $ 600 por mes para los jóvenes.
“Un proyecto de vida” declaró la mandataria. Hoy el kirchnerismo festeja, según palabras de Cristina, que 1.555.000 chicos van a recibir este plan de un total de 5 millones de jóvenes de estas edades. La década ganada, aplaude que el 78% de ese millón y medio está en situación de pobreza. “Los hijos del neoliberalismo” expresó en su discurso. ¿Nos preguntamos donde estaban Nestor, Cristina y muchos peronistas como el señor presidente de la Cámara de Diputados Julián Andrés Domínguez durante la década infame menemista?
A una semana del anuncio 90.500 jóvenes se anotaron para recibir la prestación a nivel nación. En Chacabuco, el encargado de la Anses Víctor Belforti celebró que unos 200 chicos se anotaron por el momento y este número se va a incrementar.
Como Juventud nos parece incorrecta la actitud de celebrar esos números. Más aún cuando la década ganada y el “relato” se llenan la boca hablando de los logros del modelo. De la inclusión de los jóvenes. Este es un claro síntoma de que el modelo es un fracaso, los números dados por la presidente así lo indican. Es afirmar que las políticas que aplicaron no están funcionando, no generan soluciones reales, no permiten a los individuos desarrollarse por sí mismos. No se ocupan de que los jóvenes que cobran menos que el salario mínimo vital y móvil superen ese monto, si no que les dan esta solución parcial. El Estado no se ocupa de garantizarles los derechos básicos a los jóvenes, sino que sale con declaraciones y anuncios con bombos y platillos que no solucionan el problema de fondo.
Los derechos que deberíamos tener los jóvenes deben ser muchos más, como por ejemplo: Ley de Empleo Joven; Ley de Vivienda Joven; Ley de Centro de Estudiantes; Ley del Boleto Joven; ser joven no es delito; educación sexual integral; pueblos con jóvenes; en Defensa del Ambiente; Derecho a reclamar; enfrentar la corrupción; contra el clientelismo; derecho a ser candidato; democracia participativa. Y estos el modelo premeditadamente se los olvida.
El Estado debería tener la capacidad de brindarnos empleos dignos y educación de calidad sin tener que depender de un programa populista, no fruto del amor hacia la juventud, sino del temor a los sostenidos fracasos electorales del modelo kirchnerista / peronista que hoy se cae a pedazos.
El relato kirchnerista se llena la boca hablando de la pobreza, pero realmente nunca querrán que los pobres dejen de ser pobres, se terminaría el peronismo.

Juventud GEN / FAP Chacabuco.

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